En nuestro hogar siempre queremos lo mejor y no va a ser menos a la hora de elegir nuestras lámparas. Lo primero que tenemos que tener en cuenta es la decoración de cada habitación y la utilidad que vayamos a darle a la misma. Otra de las cosas que tenemos que tener en cuenta es la altura de esa habitación.
Teniendo en cuenta estas cuestiones procederemos a buscar las lámparas que más nos gusten.
Hoy en día se estilan mucho las lámparas sencillas y fáciles de limpiar, de materiales como el acero inoxidable, pero en la variedad está el gusto, como se suele decir.
En los ambientes modernos o actuales las lámparas que están en tendencia tienen diseños en líneas rectas y pocos detalles, siendo prácticas y con una imagen vanguardista.
Estas lámparas tienen formas abstractas pero sencillas, dando un aspecto diferente a cada habitación. En ambientes clásicos, nos encontramos con un sinfín de posibilidades, en las que podemos destacar, las lámparas de cristal o las Tiffany.
Estas son un complemento decorativo que da clase y personalidad al ambiente creado en una habitación de estilo clásico. Otros modelos pueden ser las lámparas rústicas que tienen, en sus formas, la habilidad de acoplarse en los ambientes clásicos, como si fuera parte de la casa o habitación.
Sin darnos cuenta, estas lámparas se integrarán a la perfección en cualquier habitación que las coloquemos. 
Para esos espacios en los que pasen mayor tiempo los más pequeños como su habitación o una sala de estar podemos acoplar lámparas infantiles, que dan un toque diferente y divertido a la iluminación.
Pueden ser lámparas en forma de aviones, coches o flores, y estas pueden tener formas sencillas, colores cálidos y materiales muy resistentes a golpes y objetos lanzados en la habitación. La variedad de posibilidades en lámparas es inmensa y lo complicado es decidir la que más nos gusta.